Parece un tanto escandalosa, pero sea bienvenida esta luz LED roja si, colocada en el guardabarros de la bici, aumenta la seguridad de los ciclistas gracias a un impacto luminoso bien visible tanto desde los lados como en la parte trasera. El dispositivo se llama Revolight Arc y es una propuesta interesante que incorpora estas innovadoras luces de freno en la bici.

Se trata de una de las primeras luces de freno integradas en una bicicleta, por lo que se requiere de una tecnología nueva que avise cuando se esté reduciendo la velocidad para hacer parpadear la luz e intensificar su brillo y así alertar al tráfico de que se está frenando. Por lo tanto, utilizando el símil automovilístico, la luz sería tanto de posición como de frenado.

Iluminación inteligente

Con respecto a la tecnología, la Revolights Arc logra esta iluminación trasera inteligente gracias a unos sensores que detectan esa menor velocidad y hacen la transición de más a menos brillo intercalando un parpadeo que coincide con el frenado, con lo que se emiten señales muy eficaces para prevenir accidentes. Se trata de un sistema inspirado en los Rovolights originales de la misma casa, pero en este caso son más económicos y sencillos.

Alimentada con una batería de iones de litio recargable vía USB que dura ocho horas con tan sólo un par de horas de recarga, además tiene un tamaño estándar que le permite adaptarse prácticamente a cualquier guardabarros.


Sus creadores recaudan fondos desde la plataforma Kickstarter, con la ventaja de que apoyarlos tiene premio, pues han decidido lanzar el Revolight Arc a un precio más económico. Pensando en todo, se ofrecen dos modelos, uno portátil, de fácil instalación (¿quizás también de fácil robo?), y otro permanente, con sistema anti robo.