Para cualquier amante de las aves, el canario puede ser una mascota fantástica, ya que aporta color, audacia y canciones a nuestras vidas. Sin embargo, hay que tener en cuenta que en ocasiones son muy sensibles y propensos a sufrir enfermedades comunes si no se siguen ciertas pautas.

Es importante detectar a tiempo las enfermedades de los canarios. Si no se actúa rápido, estos pequeños animales tienen muchas posibilidades de morir en pocas horas. A continuación vamos a hablarte de las señales que indican que un canario está enfermo para que puedas poner remedio lo antes posible.

Ahuecamiento de las plumas

El principal síntoma de los canarios enfermos es el ahuecamiento de las plumas. Esto se debe a que cuando padecen una enfermedad, estos animales sufren un descenso de su temperatura corporal, así que sienten frío, una sensación que combaten embolándose para crear una cámara de aire caliente.

Falta de vivacidad

A este claro síntoma suelen acompañarle otros como el cese del canto, que es lo primero que pierde un macho cuando cae enfermo. Además, los canarios, que suelen estar en constante movimiento, pierden vivacidad. Por otro lado, los canarios enfermos duermen con la cabeza bajo el ala.

Otros síntomas

Por otro lado, los canarios enfermos pueden tener un apetito y sed superiores a lo normal, las plumas enmarañadas y caídas, la respiración jadeante, ruidosa y con el pico abierto; puede estornudar, toser y destilar mucosidad por la nariz; permanecer con los ojos cerrados, esconder de manera continuada alguna pata, tener las patas hinchadas o enrojecidas; puede hacer movimientos poco coordinados y sufrir de diarrea, heces líquidas o con sangre; tener el vientre hinchado o enrojecido; adelgazar a gran velocidad; y sufrir una anormal pérdida de plumas fuera de la época estival.