Si una cría de oso panda ya es todo un espectáculo, la presentación al público de 14 resulta algo increíble, como atestiguan las imágenes de todos ellos ocupando una cuna vestida con una sábana de color rosa que no podía competir en ternura con ellos.

Mostrarlos al mundo es una manera de seguir concienciando sobre la difícil situación que atraviesan estos animales, de los que apenas quedan en libertad 1.800 ejemplares. En cautividad, sin embargo, se trabaja afanosamente para intentar aumentar esa cifra, llegando ya al medio centenar los centros de investigación de estos pandas gigantes en China.

Estos 14 pequeños son los ositos panda que han conseguido salir adelante en el centro de cría de Chengdu (provincia de Sichan), conocida como la capital panda del mundo, uno de los más importantes tal y como demuestran los grandes resultados en número de crías.

La cría del panda

Como es sabido, los osos panda tienen grandes problemas de fertilidad, por lo que todos estos pandas son motivo de esperanza para el futuro de la especie, si bien los ímprobos esfuerzos hechos no son gran cosa si tenemos en cuenta su desesperada situación.



De los 20 pandas que nacieron sólo sobrevivieron 17, que se unirán a la gran familia de osos que acoge el centro, con un total de 128. Algunos de ellos no pudieron sobrevivir por aplastamiento accidental de sus madres o por su fragilidad, mala visión y bajo peso.

Para fomentar el apareamiento se les ponen vídeos de pandas copulando, se les da viagra e incluso se les realiza inseminación artificial. Afortunadamente, se ha descubierto que los pandas tienen una líbido muy fuerte durante tres días al año, coincidiendo con un celo que los científicos aprovechan para conseguir su objetivo. Muchos sacrificios para, luego, celebrar los éxitos con estas presentaciones maravillosas.
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