Descubren dos nuevas especies de arañas Pavo Real
0:00
Imposible no fijarse en ellas. Son arañas Pavo Real, una auténtica explosión de colores, pequeños y adorables insectos de entre 3 y 7 milímetros, que tienen un no se qué hipnótico. Son espectaculares. Quedan preciosas en las fotos, pero todavía resultan más increíbles en vídeo, cuando las vemos bailando con un ritmo sin igual para seducir a las hembras. Descubiertas allá por 1800, hay decenas de especies, fascinantes todas ellas, y no dejan de encontrarse otras nuevas, dos de ellas recientemente.
Ha sido en Australia, donde una estudiante graduada de la Universidad de California, Madelina Girard, ha hallado a las especies Maratus sceletus y Maratus jactatus, que tienen el sobrenombre de Skeletorus y Sparklemuffin, respectivamente, en honor a sus vivos colores y a sus sorprendentes danzas de apareamiento. Sus hallazgos se han publicado en la revistas Live Science.
Unas criaturas fascinantes
De ellas llama la atención su belleza, sus cuerpos profusamente coloreados, los movimientos rítmicos de las arañas macho, que incluso emiten vibraciones para atraer la atención de las hembras (sus cuerpos vibran y esas vibraciones las sienten las hembras), de los investigadores y ahora también de medio mundo pues sus vídeos son un fenómeno viral.
Girard, especialista en comportamiento animal, recolectó más de 30 especies de arañas pavo real diferentes en las selvas de Australia y al volver a su laboratorio, en la Universidad de Berkeley, descubrió que dos de ellas (puedes verlas en la imagen que encabeza el post) eran desconocidas.
En el vídeo puede verse a la araña bailando (no te lo pierdas), cómo levanta sus patas rítmicamente, su inefable coreografía… A partir de estas imágenes el baile está estudiándose. La investigación lleva a cabo el estudio de las danzas bajo condiciones controladas para sacar conclusiones que permitan entender estas danzas únicas, descifrar cuál es el mensaje, qué dicen a una araña hembra y cómo lo hacen, con el objeto de poder comparar las normas que difieren entre las especies a la hora de hacer los típicos rituales de apareamiento.
Mucho por descubrir
El hallazgo no es algo insólito, sin embargo. Aunque se trata de un descubrimiento importante, en realidad podría ser sólo una muestra de lo mucho que todavía queda por descubrir en torno a las arañas Pavo Real, un tipo de arácnidos de los que, más allá de la sorpresa que nos causa, todavía no sabemos casi nada. No, al menos, en comparación con lo que nos espera.
Según el entomólogo Jürgen Otto, co-autor del informe sobre las nuevas especies, a pesar de la cantidad de especies que se han descubierto en los últimos años, la sensación es de que sólo estamos empezando: “No puedo evitar sentir que sólo hemos arañado la superficie sobre el grupo de arañas más emocionante que existe. Estoy convencido de que la Naturaleza nos tiene reservadas bastantes más sorpresas”, añade.
Jürgen Otto sintió fascinación por las arañas desde que e topó con algunas de ellas en 2005, y desde entonces no deja de hacerles fotos y vídeos que revolucionan la red. Su objetivo es que dejemos de ver a las arañas como unos seres repelentes y demos un paso más allá de esa aversión inicial tan común, fobias aparte.
“Tengo la esperanza de que estos vídeos iniciarán una revolución que consiga que amemos a las arañas, en lugar de odiarlas”. Y no le falta razón, sólo hay que mirarlas… Eso sí, si tan simpáticas y adorables las encuentran, si tanto las quieren, podrían hacerles un favor, y en su próxima excursión a tierras australianas devolver a sus hábitats naturales a las pobres cautivas que metieron en un frasco de cristal. Un pequeño detalle que, a buen seguro, agradecerán con bailes fantásticos.
Ha sido en Australia, donde una estudiante graduada de la Universidad de California, Madelina Girard, ha hallado a las especies Maratus sceletus y Maratus jactatus, que tienen el sobrenombre de Skeletorus y Sparklemuffin, respectivamente, en honor a sus vivos colores y a sus sorprendentes danzas de apareamiento. Sus hallazgos se han publicado en la revistas Live Science.
Unas criaturas fascinantes
De ellas llama la atención su belleza, sus cuerpos profusamente coloreados, los movimientos rítmicos de las arañas macho, que incluso emiten vibraciones para atraer la atención de las hembras (sus cuerpos vibran y esas vibraciones las sienten las hembras), de los investigadores y ahora también de medio mundo pues sus vídeos son un fenómeno viral.
Girard, especialista en comportamiento animal, recolectó más de 30 especies de arañas pavo real diferentes en las selvas de Australia y al volver a su laboratorio, en la Universidad de Berkeley, descubrió que dos de ellas (puedes verlas en la imagen que encabeza el post) eran desconocidas.
En el vídeo puede verse a la araña bailando (no te lo pierdas), cómo levanta sus patas rítmicamente, su inefable coreografía… A partir de estas imágenes el baile está estudiándose. La investigación lleva a cabo el estudio de las danzas bajo condiciones controladas para sacar conclusiones que permitan entender estas danzas únicas, descifrar cuál es el mensaje, qué dicen a una araña hembra y cómo lo hacen, con el objeto de poder comparar las normas que difieren entre las especies a la hora de hacer los típicos rituales de apareamiento.
Mucho por descubrir
El hallazgo no es algo insólito, sin embargo. Aunque se trata de un descubrimiento importante, en realidad podría ser sólo una muestra de lo mucho que todavía queda por descubrir en torno a las arañas Pavo Real, un tipo de arácnidos de los que, más allá de la sorpresa que nos causa, todavía no sabemos casi nada. No, al menos, en comparación con lo que nos espera.
Según el entomólogo Jürgen Otto, co-autor del informe sobre las nuevas especies, a pesar de la cantidad de especies que se han descubierto en los últimos años, la sensación es de que sólo estamos empezando: “No puedo evitar sentir que sólo hemos arañado la superficie sobre el grupo de arañas más emocionante que existe. Estoy convencido de que la Naturaleza nos tiene reservadas bastantes más sorpresas”, añade.
Jürgen Otto sintió fascinación por las arañas desde que e topó con algunas de ellas en 2005, y desde entonces no deja de hacerles fotos y vídeos que revolucionan la red. Su objetivo es que dejemos de ver a las arañas como unos seres repelentes y demos un paso más allá de esa aversión inicial tan común, fobias aparte.
“Tengo la esperanza de que estos vídeos iniciarán una revolución que consiga que amemos a las arañas, en lugar de odiarlas”. Y no le falta razón, sólo hay que mirarlas… Eso sí, si tan simpáticas y adorables las encuentran, si tanto las quieren, podrían hacerles un favor, y en su próxima excursión a tierras australianas devolver a sus hábitats naturales a las pobres cautivas que metieron en un frasco de cristal. Un pequeño detalle que, a buen seguro, agradecerán con bailes fantásticos.
0 comentarios